lamentablemente somos

Humanos, Demonios depositados en los dulces labios de la vida por el azar, arrancan de su cuna a las estrellas nacientes succionando su esperanza hasta volverlas ceniza.

Viven entre espejismos volcando su deleite en la inmundicia a la que adoran con codicia y ven ciegamente perfecta

Dragones del averno defecando lava hasta consumirse ahogados en el frio mar de la ignorancia

Aman la cascara y despechan el fruto.

Condenan a los suyos disfrazados de blanca negrura solo por ser de otro sabor

Se nombran tutores de gea como si la amamantaran con sabiduría cuando solo la han violado y llenado de inmundicia.

Crean estrellas en la tierra pero ennegrecen sus cielos con el humo de su soberbia.

La luz no sanara a esta bestia corrupta de mil caras sin rostro que solo con el filo de la muerte su corazón abrirá

Hay que detener a este mandamás antes de que termine por consumir este mundo que nunca ha visto sus pétalos

Un mundo al que quiere con espinas de fuego purgar de su salvaje perfección

Su mayor anhelo es vivir en un sueño in vitro donde la tierra y la vida estén petrificadas, donde el orden y la monotonía gobiernen; sin sorpresas, sin el delicioso miedo a lo desconocido  

Mas unos cuantos dominan la maldad natural con la que fueron forjados para dejar de ser humanos y convertirse en personas, en un arma aliada en contra del lado oscuro de Prometeo

Componemos a los demás y de los demás nos componemos por ello purgar al mundo de sus males es tan fácil como crear una sinfonía con el ruido que hay en el espejo

Amen el destino y vénzanlo, respeten la pasión propia y ajena y dominaran al pasajero oscuro oculto en su alma.

Ignoren la advertencia y no serán mas  que minas olvidadas ocultándose de sí mismos para no estallar

Por hablar de vida se habla de muerte mejor volverse una ruta larga y amena que un atajo o piedra en el camino al matadero

Cada uno es su propio carcelero y aquel que no es libre en los cielos nunca lo será en la tierra por eso no cometan crímenes en contra del alma pues el cortarla en pedazos para forzarla a entrar en la jaula de la sociedad diluiría su misma esencia en el eterno abismo de la mediocridad

Tal vez aun quede una chispa de vida en este mundo, tal vez algunos dejen de lado sus demonios para convertirse en algo más que humanos para convertirse en personas